La russula drimeia es una especie de hongo que pertenece al género de las rúsulas, cuyo nombre proviene del latín y significa «rojizo» y agrupa a 750 especies conocidas. La mayoría de las especies de rúsulas tienen sombreros de colores llamativos, entre los cuales se destacan variedad de tonalidades y mezclas de rojo, violeta, lila y azul. Con menor frecuencia se pueden encontrar rúsulas amarillas y marrones en Uruguay.
Las rúsulas
El color de una rúsula no es suficiente para identificar a una especie, porque además varía según las condiciones ambientales y según el estado de madurez del hongo. No es sencillo clasificar a una rúsula ni siquiera para los expertos y hay muchas especies aún desconocidas, únicamente alrededor de treinta especies son identificables a simple vista.
Otra característica de las rúsulas es que su pie y sombrero están bien definidos y que presentan láminas debajo de este último. El sombrero tiene poca carne y ésta es firme y granulosa, por ello se desmenuza y al manipular se quiebra en trozos. Las rúsulas se pueden encontrar en montes de pinos.
La russula drimeia
La carne de la rúsula drimeia es blanca, pero al ponerse en contacto con amoníaco se vuelve roja. Este procedimiento es utilizado para identificar a la especie. También recibe el nombre de russula sardonia, término que significa «sabor acre». Su carne es áspera, fuerte y picante al olfato y al gusto. Pero la rúsula drimeia no es comestible, así que hay que conformarse con la descripción.
El sombrero de la russula drimeia varía su diámetro entre cuatro y diez centímetros. Es liso y su color es una mezcla de tonos de rojo, violeta y púrpura. En algunos ejemplares el centro puede ser más claro, con tonos amarillos o más oscuros.
Las láminas, que encontramos debajo del sombrero, son de color amarillento o beige, son quebradizas, numerosas y homogéneas. El pie puede ser de color blanco o violeta claro, es duro y de forma cilíndrica.
Simbiosis
La russula drimeia forma micorriza con el pino. El término micorriza se refiere a que hace simbiosis con las raíces de los pinos. El hongo obtiene carbohidratos y vitaminas del árbol, mientras que éste obtiene agua, minerales y nutrientes del hongo, por lo que ambas partes se ven beneficiadas de esta relación.