El picaflor, de nombre científico trochilidae, también llamado colibrí, chuparrosas, tucusito y pájaro mosca, es una familia de aves endémica de América, lo cual significa que no habita de forma natural en otras partes del mundo. Esta familia incluye cerca de 330 especies y se la encuentra en todos los hábitats y climas del continente, desde Alaska hasta el sur de Argentina.
Todas ellas comparten ciertas características: son de tamaño pequeño, tienen el plumaje colorido, sus hábitos alimenticios que los convierten en polinizadores y una peculiar forma de volar. Es fácil identificar a un picaflor cuando está en el aire, porque bate las alas con gran rapidez emitiendo un zumbido que lo hace inconfundible.
Características del picaflor
En comparación con otras familias, el picaflor es un ave de dimensiones pequeñas. Las especies más grandes pueden llegar a medir veinte centímetros y las más pequeñas alrededor de cinco centímetros. Los picaflores que podemos avistar en Uruguay son de los más pequeños. El plumaje del colibrí exhibe colores bien llamativos, y muchas veces con un brillante tono metalizado.
Tiene el pico largo y puntiagudo, que puede ser recto o curvo, dependiendo de la especie y de la morfología de las flores a las que se haya adaptado. Su tamaño varía entre el equivalente al largo de su cabeza hasta el largo de su cuerpo. Tiene lengua protráctil, lo cual significa que es larga y que se puede proyectar mucho hacia afuera del pico en busca de alimento, igual que algunos reptiles y anfibios.
Comportamiento del picaflor
El picaflor tiene la ingeniería de un helicóptero, mueve sus alas con una rapidez de hasta ochenta aletazos por segundo, que le permite permanecer en un vuelo estacionario. Esto significa que se mantiene suspendido en el aire en el mismo sitio. A su vez, puede rotar sus alas hasta 180 grados, lo cual le permite volar hacia atrás.
Este constante aleteo le consume mucha energía, por eso pasa la mayoría del tiempo en reposo o buscando comida. El picaflor frecuenta lugares donde crecen plantas con flores como las tan apreciadas madreselvas y principalmente las de colores en tonos de rojo, rosado y anaranjado.
Se alimenta del néctar y de pequeños insectos que se encuentran en el interior de las flores. Busca especialmente aquellas flores con corola de forma de tubo alargado. Al igual que las abejas, contribuye a polinizar yendo de una planta a otra.
Elige las flores con contenido de azúcar de alrededor del 25% y las descarta cuando es menor al 15%. El picaflor tiene la habilidad para estimar la cantidad de azúcar de una flor. Llega a consumir hasta cinco veces su peso corporal en un día.
Es un ave diurna que busca el sol y evita la sombra. El picaflor no puede andar sobre el suelo, por ello se lo ve solamente posado sobre las ramas de los árboles o en pleno vuelo.
Cómo se reproduce
El picaflor es un ave solitaria, aunque en época de apareamiento se la puede ver en pareja o con más de un ejemplar de su especie. El período de reproducción coincide con la época donde abundan las flores y por ende el alimento.
El macho elige un territorio, el cual defiende y a donde las hembras lo visitan para el apareamiento. Para llamar la atención de las hembras, redobla los esfuerzos de su aleteo, llegando a batir las alas hasta 200 veces por segundo.
Nidifica una o dos veces por temporada. Construye su nido con tela de araña, musgos y utiliza ramas y hojas para darle resistencia. Siempre escoge un sitio por encima del nivel del suelo.
La hembra suele poner de uno a dos huevos, de color blanco y de tamaño grande en relación a la dimensión de su cuerpo. Las crías nacen sin plumas y de ojos cerrados y son alimentadas a base de insectos. Recién abren los ojos luego de transcurridos entre dieciséis y veinte días.