
El chimichurri es la salsa que típicamente se utiliza para aderezar el asado uruguayo, elaborada a base de perejil, orégano, ajo, sal y salmuera en sus orígenes, aunque actualmente se sustituye por vinagre. Esta peculiar salsa, algo picante, tiene su origen en Uruguay, pero también en Paraguay y Argentina.
No solo se utiliza para realzar el sabor de la carne asada, sino que también es un excelente aderezo para ensaladas y un buen marinado para pescados y pollo. Incluso se puede disfrutar simplemente untándola en rodajas de pan o tostadas.
Aunque no existen testimonios históricos que lo prueben, se dice que el nombre de esta salsa surgió con los británicos que invadieron las colonias españolas del Río de la Plata a principios del siglo XIX y fueron hechos prisioneros. Según esta teoría, los prisioneros pedían condimento para la comida combinando palabras españolas, locales e inglesas, diciendo: «che mi curry» para referirse a la salsa.
Otra versión, difundida por la prensa argentina pero sin evidencia histórica, menciona a un inmigrante de origen irlandés que, en un intento de hacer una salsa Worcestershire con los ingredientes locales, terminó creando la mezcla que hoy conocemos como chimichurri. Este irlandés se llamaba James McCurry, y se cree que el nombre de la salsa proviene de su nombre españolizado: «Yimi Churri».
Receta de chimichurri

Ingredientes
- Media taza de hojas de perejil (medio atado).
- Dos cucharadas de orégano (preferentemente fresco).
- Entre dos y cuatro dientes de ajo, según la intensidad deseada.
- Dos cucharadas de vinagre.
- Media taza de aceite.
- Sal y pimienta a gusto.
- Agua.
Preparación
Los ingredientes básicos para preparar chimichurri son perejil, orégano, ajo, vinagre, aceite, sal y pimienta. Opcionalmente, se pueden agregar albahaca, tomillo, laurel, morrón (ají), cebolla de verdeo, cebolla y mostaza en polvo. Es preferible utilizar ingredientes frescos en lugar de condimentos secos.
Los ingredientes seleccionados deben picarse muy finos, o bien triturarse en un mortero. Para ahorrar tiempo, se puede usar un procesador, aunque la consistencia no será la misma que la del chimichurri tradicional.
Una vez triturados o picados los ingredientes sólidos, se mezclan en un frasco de vidrio previamente esterilizado, junto con el vinagre, el aceite y un poco de agua tibia para completar. Debe dejarse macerar algunas horas y almacenarse en la heladera. Se recomienda consumirlo dentro de las 48 horas.