Misterio y naturaleza en las grutas del Cerro Arequita

Cerro Arequita

Ubicado en el Departamento de Lavalleja, a doce kilómetros de su capital, la ciudad de Minas, se encuentra el Cerro Arequita, a 248 metros sobre el nivel del mar. Es un cerro de origen volcánico con más de 300 millones de años. Su nombre  es de origen guaraní, se traduce como “agua de las altas piedras de la cueva”. Forma parte de las Sierras de Minas y se sitúa en las cercanías de la naciente del Río Santa Lucía. Esta cadena de sierras atraviesa todo el departamento hasta llegar al mar en la ciudad de Piriápolis, en el Departamento de Maldonado.

En el interior del Cerro Arequita se formaron numerosas grutas, muy ricas en granito, producto del pasaje de lava en la época en que tenía actividad volcánica. En la base del cerro se puede visitar una de estas cuevas, que se bautizó con el nombre de Gruta de Colón. También hay una importante gruta en la cima del cerro, pero ésta es de difícil acceso y no está abierta a los visitantes.

El Arequita es centro de reunión para grupos de meditación y es considerado un importante centro energético de Sudamérica. Sus grutas y túneles naturales se extienden cientos de kilómetros bajo tierra, e históricamente funcionaron como refugio, sobre todo en época de la Guerra Grande y en la última dictadura militar.

Para ingresar a la Gruta de Colón se debe pagar entrada y bajar con un guía, ya que se trata de un área privada, administrada por la familia Alzugaray, que de generación en generación se ha dedicado a la tarea de conservar este frágil ecosistema. En el interior de la gruta y en la más absoluta oscuridad, hay una cámara habitada por centenares de murciélagos y vampiros. Se cree que la Gruta de Colón era usada por los indígenas para la celebración de rituales espirituales.

MIrador en Cerro Arequita

Un sector importante del cerro, junto con la región circundante de la naciente del rio Santa Lucia y el Bosque de Ombúes, forman parte de un área protegida por el Estado Uruguayo. Incluye 950 hectáreas y fue bautizada Parque Nacional Juan Antonio Lavalleja. En las laderas del cerro crece una flora autóctona bien variada, y entre esta vegetación y entre las numerosas cuevas habitan zorros, comadrejas y otras especies típicas del microclima serrano. También se pueden ver buitres de cabeza negra y roja sobrevolando el área, águilas, halcones y gavilanes.

En la base del cerro se encuentra el parador el Mirador, que ofrece servicio de restaurant y visitas guiadas. Se pueden hacer cabalgatas, ascender a la cima del cerro o paseos hasta la Laguna de los Cuervos. En la portera para ascender al Cerro Arequita hay una pequeña cabaña donde se ofrecen actividades tales como paseos guiados, y para los más aventureros se ofrecen lecciones de rapell. El cerro presenta en una de sus caras una piedra lisa vertical, creando el escenario ideal para la práctica de este deporte extremo.

Los visitantes pueden hacer uso de las instalaciones del Camping Municipal, situado a orillas del Río Santa Lucía. Sus servicios incluyen restaurante, almacén, baños, piscinas, juegos, parcelas con luz, mesa y agua corriente. También se ofrece alquiler de cabañas, con capacidad para alojar desde dos hasta diez personas. Se puede llegar en automóvil, o en un servicio de ómnibus desde la terminal de Minas. Por más información te puedes comunicar al  (598) 4440-2503. Otra opción de alojamiento es el camping privado Laguna de los Cuervos, situado a orillas de la laguna del mismo nombre.