El antiguo Barrio Reus es un complejo de viviendas diagramado y construido por el español Emilio Reus a fines del siglo XIX. Se trata de uno de los pocos barrios de Montevideo que fue planificado desde cero. Hoy las viviendas son Monumento Histórico Nacional y están en el límite de los barrios Villa Muñoz al sur y Barrio Reus Norte. La zona es conocida popularmente como el Barrio de los Judíos.
Emilio Reus, nacido en Madrid en 1858, era un empresario dueño de la Compañía Nacional de Créditos y Obras Públicas. Fue con esta empresa que se dedicó a planificar un barrio con el fin de ofrecer viviendas confortables y dignas a la clase obrera, pero sin excluir a las clases más pudientes, porque construyó viviendas para todos los bolsillos.
Emilio Reus compró una chacra de 18 manzanas al norte del centro de Montevideo. Por entonces solo estaba la calle Arenal Grande, que conectaba directamente con la arteria principal de la ciudad, la Avenida 18 de Julio. También estaban delineadas algunas de las calles que atravesaban Arenal Grande, que son las que hoy forman las manzanas triangulares. Las proas que forman estas irregulares manzanas son parte de la identidad del barrio, pero no son obra de la planificación de Emilio Reus, sino que forman parte de un ordenamiento territorial precedente.
Construcción del Barrio Reus
Las obras comenzaron en 1888. Durante todo el proceso se emplearon a más de dos mil obreros. Para la época fue una construcción monumental. Fue necesario importar ladrillos porque las fábricas de Montevideo no alcanzaban a abastecerlos. El barrio se fundó oficialmente en mayo de 1889, cuando se remataron las primeras 300 viviendas del complejo.
En total se construyeron 531 viviendas, la mayoría de dos pisos, distribuidas en 27 cuerpos. Reus construyó calles privadas, un poco menos anchas que las calles públicas. Estas calles privadas cortan por el medio lo que sería una manzana cuadrada normal de la ciudad de Montevideo. Por eso las manzanas del Barrio Reus son rectangulares. En estas calles privadas se construyeron balcones que casi se tocan con las casas de al lado, se pretendía promover el contacto entre los vecinos.
Si bien desde afuera y para un observador no muy atento las viviendas parecen todas iguales, se construyeron sectores para diferentes poderes adquisitivos. Por ejemplo, las casas de la calle Porongos, por entonces una calle privada, eran las construcciones más humildes del complejo. Es la zona más alejada de Arenal Grande, la vía que le daba y le sigue dando vida al barrio.
En el otro extremo, encontramos casas con terminaciones de mármol. Las más costosas se construyeron sobre las calles públicas, tienen fachadas más anchas y mansardas. El término mansarda se refiere en arquitectura a las ventanas en los tejados, que en este caso servían para iluminar la buhardilla, un verdadero signo de lujo y elegancia en la época. El barrio quedó inconcluso, el proyecto original de Emilio Reus incluía una plaza y jardines que no llegaron a realizarse.
Intervención de Bellas Artes
En 1992, en acuerdo con los propietarios de las viviendas, estudiantes y docentes de la Escuela Nacional de Bellas Artes hicieron una intervención artística en el Barrio Reus. Las fachadas homogéneas del complejo fueron pintadas de vivos colores, combinando marcos de puertas, ventanas, balcones y líneas decorativas con contrastantes tonos. También se colocaron faroles en las fachadas y se agregaron macetas para adornar los balcones.
Actualmente, todas las calles antes privadas son de acceso público y algún tramo de éstas fue convertido en peatonal y se colocaron bancos y plantas a lo largo. Las fachadas coloridas, aunque ya algo deterioradas, la peatonal de piedra, los espacios verdes, los faroles y los pintorescos balcones transportan a los visitantes a una época distinta y a la nostalgia de una ciudad alegre y soñadora.