En la ciudad de Durazno, a un costado de la ruta nacional número 5, a la altura del kilómetro 182.500, se encuentra el Bioparque Washington Rodríguez Piquinela, ex Zoológico Municipal. Es un paseo para toda la familia, donde se puede aprender sobre animales de diferentes especies autóctonas y de otros continentes, mientras se los observa en hábitats especialmente construidos para mitigar los padecimientos del cautiverio.
El Bioparque alberga 500 ejemplares de 250 especies de animales: leones, tigres, pumas, jaguares, una osa, un hipopótamo, aves, monos, coatíes, yacarés, entre muchos otros. Una extensa superficie de 100 hectáreas es el hogar de estos mamíferos, reptiles y aves.
En el año 2018, tras una reestructuración que llevó alrededor de 24 meses de trabajo, el antiguo Zoológico Municipal de Durazno se convirtió en un bioparque. En esta transformación se derribaron todas las jaulas de concreto y los barrotes, aunque se mantuvieron dos, a modo de exhibir cómo era la estructura del viejo zoológico.
Es un lugar que cualquier visitante puede disfrutar, se construyó pensado en la inclusión y accesibilidad. Toda la cartelera está traducida al sistema braille para personas no videntes.
Gracias al Centro de Enriquecimiento, el Bioparque cuenta con una sala equipada con tecnología de punta, con un sistema de pantalla de sonido envolvente que permite a los visitantes sentirse parte del hábitat natural de los animales.
Además, cuenta con personal capacitado para brindar información científica y contar el trabajo que realizan día a día con los animales que allí se cuidan.
Una gran variedad de aves corredoras, cérvidos y mamíferos, como el carpincho y el hipopótamo de casi 3.000 kilogramos, se encuentran conviviendo libremente en la llamada pradera abierta que dispone de dos tajamares y se extiende hasta los limites con el Parque de la Hispanidad.
Sendero de los Sentidos
Uno de los paseos más recomendados es el Sendero de los Sentidos: se trata de un recinto de enormes dimensiones, compuesto de siete pajareras que se conectan entre sí, permitiendo a los pájaros volar de una pajarera a la otra, el visitante atraviesa los recintos caminando por un pasillo.
Para este paseo el parque ofrece lentes de visión inhibida, con el fin de que los visitantes puedan experimentarlo sintiendo los sonidos de las aves, los olores y texturas, como la textura del nido de un hornero, por ejemplo. Esta propuesta esta pensada para personas con poca visión o no videntes.
La osa María
La osa María llegó al Bioparque en el año 2001 desde el zoológico de Salto. Es alimentada con una dieta a base de miel, carne, frutas y verduras, pesa 260 kilos aproximadamente. Descansa en una cómoda cama de alfalfa. Su recinto pose una cascada como se puede observar en la foto, una piscina, aire acondicionado en su «cuarto» y un amplio espacio de dispersión.
El hipopótamo Pancha
El hipopótamo Pancha llegó desde Brasil cuando solo tenía dos años de edad. Al 2018 ya tiene 35 años y su peso se estima en 3.000 kilos. Se ubica tercero en la lista de animales terrestres más grandes del planeta.
Felinos
Los pumas y los jaguares se ubican en recintos especiales bajo estrictas medidas de seguridad, ya que estas especies están extintas en la vida silvestre de nuestro país. También encontramos en el mismo recinto a sus parientes extranjeros, los tigres y los leones.
Visitas al Bioparque de Durazno
Los funcionarios del Bioparque ofrecen visitas guiadas a escuelas, excursiones u organizaciones de cualquier índole. Las visitas guiadas se realizan los días miércoles, jueves y viernes, previa coordinación. Las reservas se realizan a través del teléfono (598)4362-0926.
Para el público general, el Bioparque permanece abierto de miércoles a domingo inclusive. Los días lunes y martes permanece cerrado, son los días destinados a la atención general de todo el recinto y a los cuidados de la población animal.