Baño de la India

Salto de agua en Baño de la India

Si bien el balneario Villa Serrana, ubicado en las Sierras de Minas del Departamento de Lavalleja, no es uno de los destinos más escogido por los uruguayos para pasar las vacaciones de verano porque no tiene playas, hay opciones para refrescarse y darse un baño en los días calurosos de verano.

El Baño de la India es un salto de agua precedido de una pequeña laguna que se formó con la construcción de una represa al paso de la cañada, en la zona este del balneario. La represa fue construida por el arquitecto uruguayo Julio Vilamajó, en el marco del proyecto de planificación y construcción de Villa Serrana.

Cuando la temperatura sube es el sitio ideal para darse un baño, incluso se puede ir con niños porque es poco profundo. Está rodeado de monte nativo, lo cual aporta sombra a los días más calurosos.

El camino para llegar al Baño de la India está señalizado, es fácil llegar desde cualquier parte del balneario siguiendo los carteles. Al llegar te encontrarás con un mirador y sitio de descanso con banco. Se desciende por unas escaleras de piedra hasta llegar al salto de agua. La represa se puede cruzar caminando por encima, permitiendo a los visitantes alcanzar la otra orilla, que de otro modo no sería accesible sin mojarse.

Playa en Baño de la India

Descendiendo un poco más por las escaleras después de la represa, se llega por un corto tramo de sendero a una pequeña playa que se forma en la caída del salto de agua. Desde arriba no se ve  por la vegetación, por eso es un lugar poco frecuentado. Da el sol casi todo el día y es posible trepar las rocas y situarse debajo de la caída de agua para recibir un hidromasaje.

Para los que disfrutan de caminar al aire libre, desde el Baño de la India comienza el Sendero de Martiniano, que acompaña el recorrido de la cañada varios metros entre frondosa vegetación.

Leyenda del Baño de la India

Represa en Baño de la India

No sabemos si el Baño de la India toma el nombre por la leyenda de la india Yaguá Pytá o si la leyenda surge para explicar el nombre y promover el balneario, pero hay una leyenda que circula alrededor del sitio y es la siguiente.

Yaguá Pytá era una joven india, hija del cacique de la tribu, que un día llegó hasta una pequeña laguna. Tomó agua, luego se sumergió y nadó por un rato. Otro joven indio de la misma tribu, llamado Carapé, la vio y se escondió entre la vegetación para espiarla. Carapé se llevó la ropa de la joven, que cuando se dio cuenta que no tenía cómo tapar su cuerpo se quedó en el agua y murió de frío.

Yryvú, el padre de la india, se lamentó no haber vigilado a su hija luego de haber encontrado su cuerpo flotando en la laguna y ajustició a Carapé. Hoy Yaguá Pytá sigue frecuentando la laguna convertida en puma, mientras Carapé, convertido en cerro, la espía, pero esta vez con la vigilancia de Yryvú que ahora sobrevuela el valle en forma de cuervo.